El Curiosity es uno de los barcos que ya ha anunciado su presencia en la Copa América del 2024. Sin velas y con 45 metros, este superyate, esencia del mejor ‘made in Italy’ es una de las incorporaciones más recientes al mercado chárter de grandes esloras con una fórmula muy diferente a la de sus competidores: con un precio cerrado por semana que oscila entre los 135.000 y los 160.000 todo incluido.
“Hemos visto que en el mercado del lujo había un nicho muy determinado: el cliente que puede permitirse disponer de un superyate para una semana y que luego no quiere sorpresas con el precio final”, indica Adalgisa Conte, directora de Sea Number Nine, la empresa propietaria y gestora del barco.
“Por ese precio cerrado, nosotros incluimos una semana a bordo con todas las comidas, cenas, estancia, juguetes acuáticos y 400 millas náuticas de navegación”, comenta.
La diferencia del Curiosity frente a otros yates similares o de mayores dimensiones es que quien los alquila por una semana paga un precio ya importante, al que se le han de añadir todos los extras: comidas, bebidas, tasas portuarias, combustible y otros imprevistos, lo que eleva la factura final un 30% sobre lo ya pagado: varios miles de euros más.
En el ‘Curiosity’ pueden dormir hasta 12 personas, a cargo de 10 tripulantes, aunque durante el día la capacidad del barco aumenta.
La idea de disfrutar del lujo de un megayate a un precio cerrado es de la familia Moretti, que entre otros importantes negocios tienen un hotel boutique en el corazón de Florencia, el Firenze Number Nine y actualmente están reconstruyendo dos superyates más para operar en breve una flota de tres embarcaciones de recreo de grandes esloras.
“Somos muy cuidadosos con la estética, con la decoración y nos gustan los barcos clásicos, como este Curiosity, que se botó en 1985 con el nombre de Il Cigno”, nos comenta Ginevra -Gingi- Moretti, que con 30 años es la co-armadora de la flota y el espíritu de este proyecto marítimo.
La idea es reformar varios grandes yates veteranos aprovechando su línea clásica y ponerlos al día tanto tecnológica como estéticamente. “Hemos confiado en una marca italiana: Nardini Forniture y yo también he puesto de mi parte en algunos detalles de la decoración, aunque aquí, al margen de lo bonito que pueda ser esto, lo importante y el tesoro de este barco es su tripulación”, indica Moretti.
Y efectivamente, las 10 personas que trabajan a bordo, tanto en la parte técnica como en la de navegación o la de servicios a los huéspedes son impecables. La proporción entre tripulación y pasaje es casi de uno a uno, pues como máximo pueden dormir a bordo 12 personas, aunque para eventos de día, recepciones o fiestas, la capacidad del yate es mucho mayor.
“Como barco, podemos movernos a cualquier lugar: Sicilia, Cerdeña, Baleares o la Costa Azul”, indica Adalgisa Conte. “Lo que ya sabemos más a largo plazo es que en 2024 vamos a estar en Barcelona para la Copa América. Es un evento de primera magnitud y alcance mundial, que interesa a muchos de nuestros clientes y futuros huéspedes.»
«Estaremos en el puerto como residencia VIP para quien le interese seguir estas regatas. Nos entusiasma la ciudad y este puerto.” Confiesa la directora de esta singular compañía marítima toscana diseñada para el más exquisoto ‘dolce far niente’.
Hasta el 2024 queda ya algún tiempo y hasta entonces las reservas para disfrutar de la experiencia a bordo del Curiosity se van sucediendo: desde grandes familias en busca de vacaciones y privacidad a productoras de cine que han fletado el barco para rodajes o grupos de amigos que han planteado pasar parte de su tiempo de ocio en verano del 2022 navegando al norte de Sicilia a bordo de este yate que aun con bandera maltesa derrocha italianidad por los cuatro costados: estética, decoración, gastronomía y el grueso de la tripulación son de ese país.
“Somos la esencia del lujo elegante y tranquilo made in Italy”, indica Ginevra Moretti “ofrecemos una fórmula muy original de entender este mundo y hemos venido para cambiarlo para bien”, dice la joven armadora.
Yuniet Blanco Salas